El trabajo social va mucho más allá de lo que muchos imaginan. No solo se trata de gestionar casos en el sistema de bienestar infantil o ayudar a quienes luchan contra adicciones; en un hospital, el trabajo social se convierte en una red de seguridad vital para pacientes en uno de los momentos más vulnerables de sus vidas. 

Desde la pediatría hasta la geriatría, en cada rincón del hospital, los trabajadores sociales están allí para identificar y satisfacer las necesidades físicas, psicológicas e incluso como guía en temas financieros de los pacientes, ofreciéndoles soluciones que aportan alivio y esperanza.

Ayudando a los pacientes a enfrentar sus diagnósticos

Recibir un diagnóstico médico puede ser un momento extremadamente difícil para muchos. Los trabajadores sociales en el ámbito de la salud se centran en acompañar a los pacientes para que procesen tanto los aspectos psicológicos y emocionales como los físicos de sus problemas de salud.

Organizan grupos de apoyo, coordinan sesiones de consejería para manejar la ansiedad, la depresión o los problemas de autoimagen, y proporcionan materiales educativos tanto para los pacientes como para sus familias. 

Su rol es escuchar y ofrecer consuelo, llenando los vacíos en la red de apoyo existente y asegurando que los pacientes no enfrenten sus desafíos solos.

Coordinación del cuidado post-hospitalario

La transición del hospital al hogar es crítica. Aunque se informe a los pacientes que están listos para el alta, muchos no se sienten preparados para dejar la seguridad del hospital. 

Los trabajadores sociales intervienen para asegurar que los pacientes tengan lo necesario para una recuperación exitosa, ya sea coordinando terapia física o rehabilitación, según el caso. En casos donde se necesita un cuidado más continuo, facilitan el enlace con residencias asistidas o centros de enfermería especializada.

Seguimiento de la recuperación

La labor de los trabajadores sociales no termina cuando el paciente sale del hospital. Realizan seguimientos durante su recuperación para asegurar que continúan adoptando hábitos saludables y siguiendo las prescripciones médicas.

Preguntan cómo se están recuperando, qué obstáculos encuentran y ayudan a coordinar citas de seguimiento o cuidados adicionales en casa. Su objetivo es mantener a los pacientes lo más saludables posible y apoyarlos en su camino hacia la recuperación.

Trabajo Social en el Hospital Pablo Tobón Uribe

En el Hospital Pablo Tobón Uribe, el Departamento de Trabajo Social se dedica a mejorar la adherencia de los pacientes a los tratamientos ambulatorios. Ofrecen una evaluación completa que incluye aspectos socioeconómicos y la detección de factores de riesgo que puedan impactar su tratamiento. 

Desde la evaluación para trasplantes hasta el apoyo en unidades de cuidados paliativos y grupos especializados, su misión es ofrecer un soporte integral que abarque no solo la condición médica, sino también las circunstancias personales, familiares y sociales que influencian el bienestar del paciente.

Su trabajo en clínicas especializadas y diversos grupos terapéuticos demuestra su compromiso con una atención comprensiva y especializada, asegurando que cada paciente reciba no solo cuidado médico, sino también apoyo emocional y logístico en cada paso de su tratamiento.

Conclusión

El trabajo social en el contexto hospitalario es fundamental para garantizar que la atención médica sea completa y compasiva. Este equipo de profesionales dedicados es crucial para tejer la red de apoyo que cada paciente necesita para no solo recuperarse, sino también para enfrentar el futuro con mayor seguridad y esperanza.

Encuentra aquí toda la información de nuestra área de Trabajo Social. Estamos listos para escucharte y acompañarte con un equipo profesional y con Alma.