El poder de los cuidados post operatorios luego de una cirugía de cabeza y cuello
Los cuidados post operatorios son una parte fundamental del proceso de recuperación luego de una cirugía de cabeza y cuello. Aunque la intervención médica marca un momento decisivo, es en los días, semanas y meses siguientes donde verdaderamente se reconstruye la salud, la autonomía y el bienestar del paciente.
En el Hospital Pablo Tobón Uribe, este camino está acompañado por un equipo interdisciplinario que piensa en cada detalle para que la recuperación sea digna, humana y efectiva.
Una vigilancia especializada desde el primer día
El primer paso en los cuidados post operatorios comienza en el momento en que el paciente sale del quirófano. Según la complejidad del procedimiento, es trasladado a una unidad hospitalaria o a cuidados intensivos, donde se activa un protocolo riguroso de monitoreo.
Durante esta etapa inicial, se controlan signos vitales y se evalúa la respuesta del cuerpo a la cirugía, el equipo médico administra analgesia ajustada al dolor del paciente, se realiza seguimiento constante a la herida quirúrgica, los drenajes y posibles signos de infección y la unidad de enfermería brinda acompañamiento emocional capacitando a los familiares sobre el proceso que comienza.
En casos específicos, como cirugías que comprometen vías respiratorias o funciones básicas, también se inicia rehabilitación respiratoria desde los primeros días. Este enfoque temprano mejora significativamente los resultados a mediano plazo.
Alimentarse para sanar: Energía, cicatrización y seguridad
Una parte crítica de los cuidados post operatorios es la nutrición, muchas intervenciones en la cabeza y el cuello afectan temporalmente la deglución o masticación, por lo que no todos los pacientes pueden comer de forma inmediata ni tradicional.
El proceso comienza con la evaluación de la vía oral por parte del equipo de fonoaudiología, dependiendo del caso se inicia una dieta líquida, blanda o incluso nutrición por sonda, se adapta la dieta progresivamente, cuidando que cada bocado sea seguro y el equipo de nutrición diseña un plan personalizado que favorece la cicatrización y evita la pérdida muscular.
Reaprender a hablar, tragar y comunicarse
Cuando la cirugía afecta estructuras como la lengua, faringe o laringe, es común que el paciente experimente alteraciones en la voz, la comunicación o el acto de tragar, estas funciones pueden rehabilitarse con el acompañamiento adecuado.
Aquí comienza la terapia del lenguaje, uno de los pilares menos visibles pero más transformadores de los cuidados post operatorios, con ejercicios personalizados, dispositivos de apoyo y estrategias comunicativas, los pacientes recuperan habilidades que dan confianza y autonomía.
Muchos vuelven a hablar, tragar o sonreír con seguridad en semanas y otros aprenden nuevas formas de comunicarse según su proceso.
Recuperar el movimiento es recuperar la vida
Los cuidados post operatorios no solo se centran en lo interno, la movilidad es fundamental para prevenir complicaciones, mantener la fuerza y favorecer el retorno a la vida cotidiana.
Las cirugías de cabeza y cuello pueden afectar músculos, nervios y posturas naturales, por eso, fisioterapeutas especializados del HPTU trabajan con:
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Ejercicios suaves desde el primer día para evitar rigidez.
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Movilización cervical y reeducación postural.
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Drenaje linfático para evitar inflamación (linfedema) en cuello y rostro.
Está comprobado que los pacientes que inician fisioterapia temprana tienen menos complicaciones y una mejor calidad de vida a largo plazo.
Salud emocional: El otro gran músculo que debemos cuidar
Una cirugía que modifica la voz, la apariencia o las funciones básicas no solo deja cicatrices en el cuerpo, también remueve emociones: miedo, ansiedad, tristeza e incertidumbre. Por eso, en el HPTU, los cuidados post operatorios incluyen acompañamiento psicológico desde el primer momento.
El área de salud mental trabaja junto al paciente y su familia para: Acompañar procesos complejos como el dolor crónico o la pérdida de funciones, fortalecer la autoestima ante los cambios corporales y manejar el impacto emocional del diagnóstico y de la cirugía.
Este apoyo es crucial para que el paciente se sienta completo, incluso en medio de su fragilidad.
Recuperación con sentido humano
Los cuidados post operatorios son la oportunidad de sanar desde la confianza, de recuperar funciones que parecían perdidas y de reconstruir una vida plena y activa.
En el Hospital Pablo Tobón Uribe, creemos en una recuperación con sentido humano, basada en evidencia, pero también en compasión, La recuperación no empieza ni termina en el quirófano: Continúa en cada paso de regreso a casa, en las rutinas, la comida, el movimiento y la vida misma.
Conclusión
Cada pequeño avance tras una cirugía es un logro, el primer alimento, el primer paso, la primera palabra recuperada. En el Hospital Pablo Tobón Uribe, entendemos que los cuidados post operatorios no son solo parte del tratamiento, son el alma de la recuperación.
A través de un acompañamiento médico, emocional y funcional, ayudamos a que cada persona no solo sane su cuerpo, sino también recupere su libertad, su voz y su vida.